Feliz, gozoso es el pueblo que sabe aclamarte no solo en público, sino que te abre su corazón en oración y te confia lo más íntimo de sus secretos, esos que no se los confiarían a nadie. Dios tiene una consideración espacial por aquellos que andan en la luz de su rostro, se deleitan y se alegran en el Señor todo el día. A ellos, ya no les deleita las cosas pasajeras de la vida, tienen su vista en las cosas de arriba y siguen al Cordero por dondequiera que él va.
Todo aquel que se ocupa en estas cosas recibirá una doble porcción de su Espíritu. El versículo 15 puede ser comparado con el capítulo 1:1: "Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos,Ni estuvo en camino de pecadores, Ni en silla de escarnecedores se ha sentado".
No hay comentarios:
Publicar un comentario